Después de pasar un fin de semana en La Rioja entre alcohol,
tapas y bocas-violetas se me ha venido a la memoria una de mis canciones en
castellano favoritas, “Todo se transforma” de Jorge Drexler. Aunque todos los
que me conocen siempre me han escuchado decir que la música en castellano no es
de mi predilección, he de reconocer el talento y calidad de los cantautores hispanohablantes.
Quizás hubiera sido más correcto subir hoy una canción de
Joaquín Sabina después de la resaca con la que me levanté ayer, o una de Andrés
Calamaro después de mi comentario ácido a un tío muy pesado, pero ella me mancho el zapato de vino y supongo que ahora espero
que todo se transforme…
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