Me gustó una frase que hace poco me dijo un amigo. Un buen amigo. Un gran amigo. Uno de esos que conociste cuando los dos teníais más pelo en la cabeza que en los huevos (dulce infancia dónde te has metido). Era algo así como "por los buenos y malos momentos, porque cada uno esta librando su propia batalla y porque aunque deje de haber ese contacto por cosas de la vida, seguiremos estando ahí".
Bonitas palabras, aunque duras sí lees entre líneas. Es cierto que a veces la vida puede ser el ring donde te sientas como un sparring golpeado y abatido, pero con la ayuda adecuada en la esquina, te garantizo que nunca tirarás la toalla. Poli fue tan importante como Rocky para no sucumbir ante Apollo Creed. Si me necesitas, ya sabes que podemos ir a pegarle un par de piñas a un trozo de carne cualquiera en la cámara frigorífica que prefieras.
Amigo, la separación prolongada no sólo amortigua los rencores, sino que despierta y refuerza la amistad. Con el tiempo mis placeres han cambiado, pero los amigos no.
Va por ti Roy.
bfds
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